Cambio Climático





El cambio climático es una realidad que se está gestando a cada momento debido al patrón de consumo energético que privilegia los combustibles fósiles (petróleo, carbón y gas), en vez de recurrir a las energías renovables

El actual modelo de consumo energético basado en la quema de combustibles fósiles es insostenible por una razón básica: los yacimientos de esos combustibles se están agotando. Es insostenible también por una razón de fondo: ocasiona graves transtornos ambientales.

Este modelo de consumo es el principal responsable del calentamiento global del planeta y sus efectos están relacionados con la generación de pobreza.

El cambio climático aumentará e intensificará catástrofes como inundaciones, desertificación, deshielos y aumento del nivel de los océanos. La alteración de los patrones climáticos traerá una crisis en la producción de alimentos.

El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de la Organización de las Naciones Unidas (PICC) ha identificado un veloz aumento de las concentraciones de dióxido de carbono en las últimas décadas. Este compuesto, acentúa el "efecto invernadero" y, en consecuencia, el cambio en el clima global.

Eso ha ocurrido con un incremento de la temperatura global de apenas entre 0.3 y 0.6 grados centígrados desde 1750. Pero de mantenerse el actual volumen de emisiones de CO2, los expertos calculan que la temperatura del planeta podrá aumentar durante el siglo XXI hasta 4.8 grados centígrados.

De mantenerse la tendencia actual, a lo largo de este siglo podrían devenir cambios a una velocidad superior a la ocurrida en los últimos 10 mil años. Los impactos más fuertes se presentarían en las regiones polares y en los países menos desarrollados, como México, debido a su vulnerabilidad.

Renovar la esperanza

La única alternativa ante la amenaza del cambio climático es el tránsito hacia otras fuentes de energía.

Aún no se obtiene pleno provecho del enorme potencial de las energías eólica, solar, hidráulica, geotérmica, de biomasa y oceánica. Estas fuentes de energía son viables desde el punto de vista técnico y económico. Además, suministran energía en forma perenne y limpia. (El complemento indispensable es un uso adecuado de la energía, es decir, la eficiencia y el ahorro.)

 
IMPACTO EN MEXICO

La amenaza del cambio climático no pertenece a un futuro posible sino que ya forma parte de nuestro presente. Países como México serán los más afectados por este fenómeno.

Los escenarios del cambio climático para México son alarmantes, sobre todo porque el país carece de los recursos para enfrentar y mitigar los impactos de este fenómeno, además de poseer una elevada vulnerabilidad social, económica y política. Y es que un alto porcentaje de la población vive en zonas de riesgo, en viviendas precarias, en áreas con escasez de agua, en zonas con graves problemas de contaminación o depende de tierras de temporal; esta gente no cuenta con seguros, carece de suficiente alimento, de asistencia en salud y servicios. Todo esto la hace sumamente vulnerable a los efectos del cambio climático



El Estudio de País, que el gobierno de México desarrolla con la participación de las principales instituciones de investigación en este tema, advierte sobre estragos en bosques, zonas de cultivo, cuencas hidrológicas, zonas urbanas y costeras.



Desaparición de bosques


"Los bosques de coníferas y encinos se verían afectados negativamente y los bosques tropicales lluviosos se verían favorecidos", bajo un escenario con un incremento en la temperatura de 2 grados centígrados y un descenso de 10% en la precipitación. Otro estudio aplica las mismas variables y llega a una conclusión similar: "Los climas templados y semicálidos donde se distribuyen básicamente los bosques de coníferas y algunos de encinos se verían disminuidos" (Vegetación actual de México y escenario, Viller L. y Trejo I., Instituto de Geografía). Esto significa que el clima se volvería más extremo, en general, con una disminución de las zonas con climas templados y semicálidos y un aumento de las regiones de clima cálido.

Pérdida de cosechas

Las alteraciones que provoca el cambio del clima sobre la flora son especialmente graves en lo referente a la producción de alimentos, principalmente cuando la agricultura es de temporal. El informe Comportamiento en la superficie potencialmente apta para el cultivo de maíz de temporal ante un cambio climático global (Flores E.M., Araujo R. y Betancourt E., Centro de Ciencias de la Atmósfera: Liverman D., Universidad de Pennsylvania) concluye que la superficie apta para el cultivo del maíz experimentará una reducción mayor al 50%, problema que se agravará con el crecimiento poblacional.



Crisis de agua


Las alteraciones en los esquemas de precipitación son uno de los fenómenos más visibles y dramáticos del cambio climático. Una reducción del volumen de agua en cuencas demasiado explotadas puede convertirse en una catástrofe, principalmente en áreas densamente pobladas. El informe Aplicación de un criterio climatológico para conocer la disponibilidad de agua en cuencas de clima húmedo en la República Mexicana (Maderey L.E., Jiménez A., Cea Herrera M.E. y Torres C.J., Instituto de Geografía) evalúa el volúmen de agua disponible en las tres regiones hidrológicas más importantes del país, en cuanto a poblaciones que dependen de ellas: el sistema Lerma-Chapala-Santiago y las cuencas de los ríos Balsas y Pánuco.


Destaca la vulnerabilidad del sistema Lerma-Chapala-Santiago: "Se concluye que la cuenca ha sufrido una disminución aproximada del 61% de su escurrimiento y del 99.7% en la reserva de agua, en cambio, el volumen de agua aprovechado aumentó en 142%. Estas variaciones muestran la gran explotación que se ha hecho de la reserva de agua de la cuenca del Lerma para abastecer a los centros de población asentados en ella, y a la Ciudad de México que pertenece a la cuenca del Pánuco". La situación de la cuenca del Lerma habla de la alta vulnerabilidad de una enorme población a lo que puede ser un aumento de la temperatura, la reducción de la precipitación y/o el incremento de la evaporación.

Invasión del mar

El aumento del nivel del mar debido al calentamiento global impactaría casi la mitad del litoral del Golfo de México. El estudio Vulnerabilidad del litoral a los efectos por ascenso del nivel del mar en las costas bajas del Golfo de México (Ortiz M.A. y Méndez A.P., Instituto de Geografía) estima que el 46.2% de la costa del Golfo de México, sobre todo del centro hacia el sur, "es susceptible al ascenso del nivel del mar". Entre las zonas más vulnerables están las lagunas costeras y los pantanos. "Otras áreas importantes son los pastizales y tierras agrícolas, los cuales también se contaminan con la intrusión salina y son remplazados por ambientes costeros".


Un ejemplo de los efectos severos de salinización por la entrada del mar a lagunas costeras, y a tierras agrícolas y ganaderas, es la afectación de alrededor de 80,000 hectáreas provocada por las obras de dragado de Pemex en el sistema lagunar tabasqueño El Carmen-Machona-Pajonal.

Así, la elevación del mar por el cambio climático no sólo alteraría radicalmente sistemas de gran productividad biológica como las lagunas costeras, sino que también provocaría un impacto irreversible sobre la rica biodiversidad de zonas de pantanos, como la Reserva de la Biosfera de Pantanos de Centla y el Área de Protección de Flora y Fauna de Laguna de Términos.



Efectos en ciudades


Como la mayor parte de la población mundial se concentra en las ciudades, también se evalúan las consecuencias del cambio climático en la vida urbana. El informe Cambios climáticos y sus posibles consecuencias en las ciudades de México (Sánchez R.A., Colegio de la Frontera Norte) muestra la vulnerabilidad de las ciudades ante una situación paradójica: por un lado, el desabasto de agua por la reducción de las precipitaciones y por la disminución en la recarga de los mantos acuíferos y, por otro lado, las inundaciones ocasionadas por precipitaciones extremas.


Respecto a la calidad del aire, los problemas en el Distrito Federal, Guadalajara y Tijuana, podrían agudizarse. Por ejemplo, estudios en Estados Unidos han encontrado que un incremento en la temperatura podría ocasionar un aumento de las concentraciones de ozono en la atmósfera de las ciudades. para la Ciudad de México esto será muy grave, por los daños que este contaminante provoca sobre la salud de la población y la destrucción de los bosques cercanos.

Las proyecciones referidas se basan en diversos modelos, cada uno de los cuales ofrece variantes en el resultado. No obstante, son los mejores indicadores de los posibles efectos del cambio climático para México y, en conjunto, apuntan en una misma dirección: profundos transtornos económicos y sociales.


Fuente: Greenpeace mexico